Los helados son productos con gran potencial de venta, pero el éxito del negocio implica una cantidad importante de trabajo para lograrlo. Debes empezar por hacer un estudio que te indique: la mejor ubicación, los permisos sanitarios que debes conseguir, la maquinaria y en general, todo lo que se necesita para poner una heladería.
Todo comienza por el tipo de servicio que deseas ofrecer: ¿quieres un establecimiento en el cual las personas se sienten a comer sus helados o prefieres un negocio pequeño con productos para llevar?.
El tipo de local que decidas determinará en gran medida los productos que vayas a servir, tener un local amplio te plantea muchas posibilidades: poner exhibidores para generar un ambiente llamativo, mesas para consumo en el sitio y por supuesto, la infraestructura para ofrecer más productos a tus clientes.
¿Qué máquinas necesitarás?
Tu oferta depende principalmente de la maquinaria y la materia prima con la que dispongas. Por lo general las heladerías suelen presentar cuatro tipos de productos básicos que necesitas tener la capacidad de producir: las paletas, los helados suaves, los helados duros o gelatos clásicos y los helados artesanales.
En función a estos cuatro tipos de helado, necesitas una serie de máquinas especializadas que te permitan comenzar tu producción con un menú completo:
- Máquinas de gravedad
- Máquinas de bomba
- Mantecadoras
- Pasteurizadoras
- Batidoras
- Vitrinas refrigeradas
- Congeladores para helados
- Abatidores de temperatura
Hay otras máquinas que no son estrictamente esenciales para la producción pero te facilitarán mucho las cosas, como por ejemplo: las “Máquinas combinadas” que mezclan el proceso de las pasteurizadoras con las mantecadoras para producir el gelato directamente y las “Montapanas”, que te permiten tener crema batida fresca en segundos.
Estos equipos representan la columna vertebral de todo tu negocio, así que necesitarás comprar máquinas que sean de buena calidad, resistentes a los rigores de una producción continua y duraderos en el tiempo.
Tus productos básicos
Elegir todo el menú queda enteramente a tu criterio, pero los cuatro tipos básicos de helado antes mencionados son principalmente todo lo que necesitarás para tener una producción suficiente que te ayude a ver un buen retorno de tu inversión en poco tiempo:
Paletas
El procedimiento para fabricar las clásicas paletas de helado suelen ser más sencillo que el resto de los productos congelados, ya que se trata de una mezcla sólida que no requiere grandes procesos de preparación.
Antiguamente las paletas se hacían con mezclas líquidas sencillas que se dejaban solidificar en el congelador, pero con la popularización de este producto también vino la necesidad de hacer recetas más elaboradas que requerían de máquinas e ingredientes más especializados.
Hoy en día, si deseas un producto que tenga impacto necesitarás materia prima de buena calidad y sabores variados, tanto para la mezcla como para el topping.
También necesitarás una batidora para obtener mezclas uniformes que le den a tus paletas una textura cremosa al comer, un buen abatidor de temperatura para un congelamiento rápido y vitrinas que te permitan exhibir tu producto sin que se descongele o pierda consistencia.
Helado suave
El helado suave es un producto famoso, no solo en heladerías sino también en bares, restaurantes, cafeterías y cualquier negocio que haya decidido ampliar su menú con este sencillo y delicioso postre.
Realizar correctamente un helado suave depende de dos factores:
- Tu materia prima debe ser de óptima calidad y tener buen sabor.
- Necesitas una máquina de bomba o de gravedad confiable que mezcle todos los ingredientes de manera uniforme, sin grumos y con la temperatura correcta para alcanzar la textura suave.
Producir este tipo de helado es muy fácil, además que las máquinas de bomba y de gravedad presentan dos grandes ventajas:
- Poseen un sistema de almacenamiento interno, por lo que no necesitas otros refrigeradores para conservar el producto.
- Vienen en tamaño compacto.
Si tu negocio tiene un espacio reducido o tus necesidades de producción no son tan grandes, puedes adquirir una máquina para helado suave de banco y suplir perfectamente tus necesidades de producción.
Helado duro o “Gelato”
El helado duro suele tener un papel protagónico en la mayoría de los establecimientos de helados. Su consistencia es cremosa pero mucho más sólida que los helados suaves, por lo que su proceso de fabricación es un poco más elaborado.
Estos helados vienen en una variedad muy amplia de sabores, se fabrican con materias primas en polvo o pasta. La calidad de tus productos dependerá en primer lugar de que adquieras buenos ingredientes, y en segundo lugar de que tengas la maquinaria adecuada para procesarlos.
Para fabricar el gelato necesitarás varias máquinas como:
- Pasteurizadora: Para asegurarte de que tus mezclas no contengan bacterias que pudieran resultar perjudiciales para la salud.
- Batidora: Con ella garantizas mezclas uniformes para obtener helados homogéneos.
- Mantecadora: Es la que realiza el batido en frío que le da al gelato su consistencia cremosa
Existen también las mencionadas “Máquinas combinadas” con las que puedes realizar todas esas funciones en un mismo equipo. Si tus necesidades de producción son amplias, es recomendable que utilices este tipo de máquinas para que ahorres tiempo y espacio dentro de tu establecimiento.
Para los gelatos necesitarás también congeladores que te permitan almacenar el producto sin que pierda calidad y también vitrinas refrigeradas con las que puedas exhibir los distintos sabores de tus helados. Una vitrina iluminada y de buena calidad puede generar un ambiente muy atractivo en tu establecimiento.
Helados artesanales
El proceso de realización de los helados artesanales es muy parecido a la fabricación de helados duros, excepto que en vez de utilizar máquinas mezcladoras, se fabrican utilizando procesos manuales o tradicionales.
Este tipo de helados se caracterizan por la frescura de sus ingredientes, generalmente frutales, lo cual trae como consecuencia que no estén totalmente exentos de necesitar equipos avanzados. Al fabricarlos te hará falta:
- Pasteurizadora para deshacerte de bacterias
- Batidoras para rebanar y mezclar ingredientes
- Abatidores de temperatura para un congelamiento rápido que prolongue la vida útil de tus mezclas una vez realizadas
También te harán falta dos máquinas para preservar el producto una vez realizado:
- Los congeladores para almacenar las reservas y el producto excedente
- Las vitrinas refrigeradas, necesarias para poder exhibir y conservar al mismo tiempo tus creaciones.
Prepárate para todo y vencerás
En el negocio de los helados hay dos tipos de clientes: aquellos que siempre piden el mismo helado de chocolate con topping de lo mismo y relleno de lo mismo, y aquellos que van a querer experimentar con cada nuevo sabor y textura que ofrezcas, así que para poner una heladería necesitas estar preparado para suplir los gustos de ambos.
Eso sólo puedes lograrlo con equipos de calidad que te permitan crear mezclas que conserven siempre la misma consistencia y que a la vez te ofrezcan libertad de experimentar nuevas recetas sin que eso los deteriore.
Finalmente, para poner una heladería necesitas tener gusto por cocinar, ya que hacer las cosas con amor es una de las claves más importantes del éxito.